El
head coach está en medio de una renegociación de contrato con la
franquicia a la que llevó a quedarse con su primer título en la
competencia del hemisferio sur y los medios australianos lo ligaron a
una posible llegada como director de rugby de la Argentina por cuatro
años, con casa, auto, incentivos y hasta una escuela para sus hijos.
Sin embargo, el presidente de la Unión Argentina
confirmó que “no hay ninguna conversación” con el ex entrenador de
Leinster y Stade Français, entre otros, y agregó: “hace un año se habló
cuando estábamos buscando head coach y él fue muy recomendado por los
jugadores que lo habían tenido”.
Los rumores, entonces, se reducen a que Cheika, con
el histórico título de Super Rugby bajo el brazo, podría estar
utilizando a la Argentina como carnada para que Waratahs le ofrezca
mejores condiciones. Fin de la historia.
Por otra parte, Araujo afirmó que la UAR no está
todavía en búsqueda de un asesor técnico, cargo que en los dos últimos
años ocupó Graham Henry, ex entrenador de los All Blacks. “De acá al
Mundial nada, después se abre todo un nuevo panorama con la posibilidad
del Super Rugby”, dijo.
En tanto, el presidente opinó que el trabajo de
Hourcade y sus colaboradores “viene siendo positivo”, pero que la
evaluación de cara al futuro será después de Inglaterra 2015.
“Estuve con los presidentes de las tres uniones
(Sudáfrica, Australia y Nueva Zelanda) y están muy contentos con el
nivel de Argentina. Es lo que interesa en esta competencia, si te comés
50 puntos todos los fines de semana van a decir 'para qué los queremos'.
Pero en definitiva, cuando das el nivel, los tipos se sienten
tranquilos”, sumó.
En 2015, con un formato reducido, se cumplirán los
primeros cuatro años del Rugby Championship y, según Araujo, habrá
continuidad por otro ciclo más: “nos van a seguir invitando, se prorroga
esto por cuatro años, vamos con un equipo de Super Rugby y nos dijeron
si queríamos dos, pero queremos ir de a poco. El panorama internacional
es muy positivo para Argentina”.
Además, Araujo cree que, a pesar de las derrotas, el
nivel de los Pumas “es parejo” con el de las tres potencias del
hemisferio sur y espera “que el equipo no llegue muy golpeado” para el
cierre con All Blacks y Wallabies.
“Lo perdimos a Matera, a Leguizamón, estuvo Lavanini
suspendido una fecha, Hernández con un golpe en la rodilla. Tenés que
verlos en el vestuario cómo quedan después de los partidos, es una lucha
y un esfuerzo muy grande. Esperemos que lleguen enteros”, deseó.
Tras la derrota del último fin de semana a manos de
Stade Français, por la quinta fecha del Top 14, el dueño de Toulon,
Mourad Boudjellal, pidió en los medios los regresos de Fernández Lobbe y
los sudafricanos Habana y Botha para jugar ante Brive, algo que
finalmente no sucederá. “Yo no estoy para financiar al rugby argentino y
sudafricano; si no juegan no se les pagará”, se quejó.
“No hubo un pedido oficial a la UAR. El tipo perdió
un partido que no esperaba perder y salió a hablar, pero nosotros
tenemos el amparo de la regla 9 y pedimos los jugadores como
corresponde”, acotó Araujo.
Otra cuestión que acapara la atención de los
dirigentes de la Unión Argentina es el referato. Los Pumas se han visto
perjudicados por algunas decisiones en los encuentros del Rugby
Championship, especialmente con el insólito knock on que cobró el
francés Gauzère cuando Senatore le tapó un kick a Ma'a Nonu y se fue al
try.
“Tenemos una gran preocupación, no estamos conformes
pero sabemos que son errores que se irán corrigiendo. Hay una presión
fuerte de la UAR con respecto a la revisión, estamos viendo los informes
de los evaluadores, Agustín Pichot está en la comisión de juego y
revisando que todo sea correcto”, manifestó Araujo.
Cortezia: Rugby Fun
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